El robo de cables del alumbrado público es una problemática que preocupa mucho a los integrantes del Consejo de Administración de la Cooperativa Eléctrica Pergamino (Celp).
Hacia finales del año pasado esta modalidad delictiva comenzó a replicarse en diferentes puntos de la ciudad y hoy en día, a fines del primer mes del 2024, la tendencia sigue en alza.
El último caso registrado sucedió a comienzos de semana en la zona rural de la localidad de Ortíz Basualdo, a la altura de la estancia La Delfina. Un grupo de individuos no identificados se dirigieron hacia un transformador de 40 kilowatt que se encontraba en el camino rural antes de llegar a la autopista. Cortaron los cables de media tensión, tiraron el transformador al piso, lo desarmaron en el lugar, robaron todo el cobre y provocaron el corte de energía en toda la zona.
Diarionucleo.com dialogó en exclusiva con Matías Cullel, secretario de Comunicación y Relaciones Públicas de la Celp, acerca de esta problemática que en el 2023 significó una gran pérdida de dinero para la entidad.
- Los transformadores se han convertido en el nuevo blanco de los delincuentes
Cullel aseguró que desde la cooperativa se encuentran muy preocupados por la gran cantidad de hechos que se están registrando en todo el Partido de Pergamino y que ahora tienen una nueva variante. “Hemos detectado en estos últimos días que han comenzado a robar los cables de las bajadas de los domicilios particulares de la ciudad, y esto genera más salidas de la guardia de cooperativa”.
Tal como sucedió en Ortíz Basualdo, también se encuentra en aumento los robos de transformadores. “Días atrás robaron un transformador en la zona de La Rural. Esto nos llamó mucho la atención debido a que es un robo más complejo porque implica desarmarlo en el lugar. Lo peor es que esos cables no tienen cobre, entonces cuando ven que nos les sirven los dejan tirados y provocan un desastre en toda la zona”.
Lo que buscan los delincuentes que roban los cables del alumbrado público y de las bajadas de las casas es el cobre para luego comercializarlos.
Esta modalidad delictiva le significó a la Celp un desembolso de 223.200 dólares para reponer el cableado robado. Llevado a pesos, son unos 194 millones de pesos que salieron de la contribución de todos los socios de la cooperativa.
En cuanto a los transformadores, el año pasado se robaron 22 de distintas potencias, cada uno de ellos tiene un valor estimado de 10 mil dólares. “El costo económico es muy grande. Durante el 2023 se robaron un poco más de 5 mil metros de cables del alumbrado y de las bajadas de los domicilios”, explicó Cullel.
Las zonas calientes de la ciudad
Como suele hacer la policía para establecer las zonas de la ciudad en las que se registran el mayor número de hechos delictivos, la Celp confeccionó su propio “mapa del delito” para identificar los lugares más afectados.
Según este mapa, las zonas en donde se roban más cables es en las inmediaciones de las Salas Velatorias y en el Club Argentino que se encuentra ubicado en Avenida Almafuerte.
“Estos casos se producen tanto de día como de noche y suelen registrarse en los puntos de la ciudad en los que menos circulación de personas hay. A raíz de esto hemos tenido reuniones con fiscales para encontrarle una solución”, indicó.
Compartir