Hoy se cumplen 50 días del comienzo de la tercera y última gestión del intendente de Pergamino, Javier Martínez, tiempo suficiente como para realizar un balance de estos movidos días económicos y políticos.
Por eso diarionucleo.com entrevistó al máximo mandatario y habló sobre la gestión en el contexto actual. Martínez destacó la experiencia y la creatividad para mantener el municipio a flote y mencionó la falta de apoyo de la Provincia y la Nación. Se mostró preocupado por los medicamentos, principalmente por sus precios, a la hora de conseguirlos para los diferentes Caps locales.
También explicó cómo es la planificación de obras de infraestructura y abordó el conflicto con los Bomberos Voluntarios de Pergamino, su situación financiera y la falta de apoyo social. En cuanto a lo deportivo, respondió cómo ex dirigente y apasionado del fútbol, sobre las Sociedades Anónimas Deportivas.
-Como intendente, ¿siente que tiene el famoso período de transición de 100 días?
-No. De ninguna manera, porque hace 8 años que estamos gestionando y eso hace que no tengamos esos primeros 100 días. Entonces, quizás, la experiencia nos puede permitir aclimatarnos mejor a un momento tan difícil en la administración.
El que administra un hogar, una empresa, o el que le toca administrar algún recurso público como nosotros, vivimos momentos muy difíciles donde hay que tener mucha creatividad e imaginación para poder mantener el barco a flote.
-¿Es la gestión más difícil que le tocó atravesar como intendente?
-Desde el punto de vista de la economía general es muy factible que sean los momentos más traumáticos que viví como intendente, porque los bienes y servicios que el municipio le provee a los vecinos son diarios. Brindar esos bienes y servicios requieren de una inversión y hoy nada tiene precio. Desde un medicamento que compramos para los Caps, como el combustible o el hormigón para hacer un cordón. Y lo complejo de esto es que hay productos que se tienen que comprar igual. Por suerte, este equipo siempre ha tenido una administración muy ordenada. Hoy, la situación hay que manejarla con otros parámetros.
-Como decía, son momentos traumáticos desde lo económico, ¿y desde lo político?
-Lo que más me interesa es la bandera de Pergamino. Este es un municipio que es muy sano financieramente, que hemos protegido y en estos ocho años lo hemos fortificado. Es un municipio que tiene sus recursos y que siempre tiene alguna reserva. Entonces, la fortaleza de Pergamino está en Pergamino. Los otros (por Nación y Provincia), son acompañantes circunstanciales. A veces nos han acompañado, depende de quién, un poco más o un poco menos. En los últimos cuatro años no hemos tenido ninguna compañía de la Nación ni de la Provincia. No obstante eso, la gente ve que los servicios de la ciudad siguen funcionando y que siempre tratamos de mejorarlos.
-En esta nueva era ya no están muchos funcionarios que lo han acompañado de cerca en las gestiones anteriores, ¿eso se siente en lo diario?
-Cada persona tiene su impronta. Entonces, cuando algún funcionario nuevo toma un lugar trata de darle su impronta. Y eso lo respeto porque oxigena. En el ámbito público es positivo; obviamente eligiendo a los funcionarios adecuados. Pero acá hay un equipo muy sólido, hay un camino a trazar, pero hay una gran senda donde nosotros sabemos hacia dónde vamos.
-¿Qué es lo que más le preocupa para este año y cuáles son las perspectivas para 2024?
-Estamos en un país con una crisis muy aguda y no sé hasta dónde va a ir la profundidad de esa crisis. Mi preocupación arranca por el tema sanitario, porque tenemos 17 centros de atención primaria en la salud, más los de los pueblos, y hay vecinos que consiguen la medicación que necesitan en nuestros Caps, por eso el tema nos desvela, porque hoy los medicamentos salen el 300% más que en octubre del año pasado.
Después, a medida que lo vamos resolviendo, ya vamos viendo algunas otras temáticas que tienen que ver con tener una ciudad mejor, como puede ser el ingreso de calle Cané, donde vamos a asfaltar unos 1.100 metros. Cané es una calle estratégica en el oeste de la ciudad por la cual se llega a la autopista.
Después seguimos programando nuestros temas que tienen que ver con lo que uno ve de este distrito. Un Pergamino que es referente en la Región, que tiene que ver con cuestiones novedosas, importantes, no solamente en la digitalización, en la transparencia, sino también en los servicios, la realización del microestadio, que para mí es un sueño; o nuestra pista de atletismo, con las fortalezas que tiene el deporte pergaminense.
-Recién mencionaba la calle Miguel Cané, la cual llega a la autopista. Otra de las avenidas o calles, que no están en buen estado, y que justamente terminan casi en la autopista, es la avenida Pellegrini. ¿Tiene pensado algún proyecto para ese sector?
-Está contemplado en este presupuesto poder pavimentarla. Pero como te dije, primero nos preocupa el tema medicamentos, el SAME y la Seguridad. Pero si la economía está dentro de lo que nosotros proyectamos, tenemos una idea de poder pavimentar la calle Pellegrini. Son unos 2.300 metros desde la Ruta Nacional 188 hasta la parte que se hizo nueva.
Si las cosas están dentro de lo proyectado, nosotros vamos a estar en condiciones de hacerla este año; sino habrá que trabajar en un plan de algún bacheo más profundo y dejarlo para el año que viene. Siempre fui muy positivo y muy optimista, por eso pienso que lo vamos a poder hacer este año.
-El año pasado volvió a resurgir la disputa con la institución de Bomberos Voluntarios, ¿Por qué ese conflicto no logra resolverse?
-Los Bomberos de Pergamino, en sus 80 años, han tenido dirigentes muy arraigados socialmente y lograron que el Pergamino civil sostenga a sus Bomberos Voluntarios como institución a través de empresas o asociaciones. Con eso solventaban las roturas, los desperfectos, el combustible, el gasto que tenía el cuartel, sin contar el personal que es voluntario.
Lo que la institución pudo lograr durante 80 años no lo ha podido replicar en los últimos 4 años. Entonces nosotros les entregamos un subsidio, yo fui el primer intendente de la historia que entregó un subsidio a los Bomberos Voluntarios. Este subsidio se empezó a transformar en algo más bien crónico. El año pasado entregamos 12 millones de pesos en subsidios, y este año ya negociamos entregar 3 cuotas de 2.7 millones cada una.
El conflicto es por qué este cuartel, que toda la vida se manejó con la ayuda de la sociedad civil, hoy no la tiene. Hoy no tiene socios, ni tiene colaboradores. Lo que estamos pidiendo es que se haga un replanteo del grupo que los dirige. Cuando la sociedad no te responde, tenés que asumir la culpa de que algo está pasando, porque antes la sociedad siempre respondía. Sino es muy fácil ir a pedirle al Municipio. ¿Pero qué sentido tiene que haya un cuerpo directivo? Justamente está para generar recursos y hoy no lo está cumpliendo, por lo que deberían darle lugar a otro cuerpo directivo que tome las riendas de lo que fue ese cuartel durante 80 años.
-¿Cómo afecta la crisis a la recaudación municipal?
-La crisis genera que la gente marque prioridades. Entonces, obviamente hay merma en la recaudación. Al haber merma en la actividad industrial y comercial, hay merma en la Tasa de Seguridad e Higiene.
Lo único que tenemos como muy positivo es que vamos a tener un muy buen año en materia de agroindustria. Estamos en presencia de una súper cosecha gracias a Dios. Eso genera un buen movimiento en la ciudad, y, quizás, eso le permita a todo el interior productivo tener algún pequeño alivio o respiro en algún sector.
-¿Son días donde se espera lo que suceda con el DNU y la Ley Ómnibus?
-Es es un tema que todos estamos esperando en estos días. Es importante que el vecino sepa que en el DNU hay algunos temas que están vinculados a lo que es la resistencia a la autoridad, elevando las penas para que exista un mayor respeto. Existe un tiempo donde la Seguridad debe elevar sus parámetros legislativos en cuanto a los procesos de excarcelación y en cuanto a las penas mínimas, o a los montos de las penas de aquellos delitos que parecería que hoy más duelen, que son los delitos contra las propiedades.
Me refiero a una especie de Emergencia en Seguridad, que es lo que la gente está esperando, porque quiere vivir mejor, pero se ve aterrada permanentemente por olas delictivas de personas que entran y salen. Y ahí tengo que ser franco, ya ni siquiera se puede criticar a la policía, porque hace su trabajo. Y acá en Pergamino la gran mayoría de los hechos se descubren, pero vivimos en este sistema de puertas giratorias que hay que resolver. Y Kicillof no lo va a resolver.
Entonces, como las normas procesales son provinciales y las normas de fondos son nacionales, a lo mejor elevando montos de penas, sin modificar el sistema carcelario se podría lograr tener detenido a quien comete delitos de forma permanente. Ese es un tema que hay que trabajarlo urgente.
-Usted fue presidente de Douglas Haig, por lo que conoce del manejo de instituciones deportivas. ¿Qué opinión tiene sobre las Sociedades Anónimas Deportivas?
-Hay que dejar que el socio elija. Actualmente en el país existen las sociedades anónimas deportivas en forma encubierta. El otro día escuchaba hablar de Riestra, que la maneja un señor que es abogado. Eso es una sociedad anónima encubierta, porque es un señor que maneja el club, y ha crecido en base al aporte de una sociedad. Y lo mismo pasa con Talleres y Defensa y Justicia.
Nosotros ascendimos en el año 2012, o sea que como presidente jugué contra Defensa y Justicia en el 2013, en el 2014 y en el 2015. Y vos veías cómo crecían cada vez que ibas a su cancha, y nosotros veíamos cómo estábamos y cómo tratábamos de cumplir con las obligaciones y demás. Pero bueno, ahí veías que los tipos iban en un Mercedes Benz y que vos ibas en un 4L. Y ellos terminaron jugando Copa Sudamericana, Copa Libertadores y nosotros terminamos en el Argentino A.
Los clubes son de los socios, los cuales deberán decidir en una asamblea. Pero sería una forma de blanquear algo que ya existe en nuestro fútbol. Estos tres casos que te dije es simplemente blanquear la situación. Pero eso hoy está ocurriendo.
-Me respondió más como dirigente. ¿Y como hincha, qué le dice su corazón?
-El hincha quiere ganar. Si vos le preguntás al hincha de Douglas, te va a decir que quiere jugar en Primera A. Y vos decís, ¿cómo? Y si para lograr llegar a Primera tenés que dar lugar a un grupo árabe, el hincha te va a decir que sí. No tengo dudas, porque el hincha lo que quiere es que la cosa avance.
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