La dispersión de precios en Argentina no es novedad. En cada provincia y en cada ciudad o pueblo el valor de los productos son diferentes. Algo parecido pasa con los combustibles, ya que sus precios varían dependiendo la región, siendo la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el lugar más barato para llenar el tanque, sin contar las provincias del sur que son beneficiadas por diversas leyes que hacen que sean casi un regalo.
En contraposición, el precio de la nafta en Pergamino sólo es superada por una capital provincial: Posadas. En el resto de las 22 capitales, el precio es inferior al de nuestra ciudad. Diarionucleo.com realizó un informe comparando el valor de las naftas Infinia de YPF, donde el costo local es de $379,60 por litro.
En tanto, en las localidades de la Región como Rojas, Salto y Colón, el litro de Infinia es de $366,30; mientras que, en Junín, el litro de Infinia de YPF cuesta $369,70. El punto más caro del territorio argentino es Posadas, la capital misionera, donde el precio por litro es de $382,10. En Caba, el valor es de 324 pesos (en enero salía $197,40), y donde menos cuesta el litro de Infinia es en el sur, más precisamente en Ushuaia, donde el litro se consigue a $271,80.
Hay tres razones principales que explican la diferencia de precios de las naftas y demás combustibles en el país. Uno es el componente impositivo, otro son los costos logísticos y también la libre oferta y demanda de mercado.
Lo cierto es que en Pergamino el precio de la nafta Infinia se paga por encima que lo hacen 22 capitales argentinas. Además de la logística y el traslado del combustible, hay determinaciones que responden a estudios de mercado o campañas de marketing que terminan incidiendo en los precios. De todos modos, el ritmo lo marca YPF. Si la petrolera nacional sube el precio, sus competidores también lo hacen.
La carga tributaria también explica las diferencias de precios de combustibles en diferentes localidades o provincias, dado a que hay distintos impuestos, algunos nacionales como el Impuesto a la Transferencia de los Combustibles, el Impuesto al Dióxido de Carbono y el Impuesto al Valor Agregado.
El hecho de que sean pocas las empresas dentro del rubro de los combustibles generan debate en torno a la posición dominante que puede tener YPF, que concentra más de la mitad del mercado, y de una eventual cartelización a la hora de poner los precios.
Llenar el tanque, casi imposible
Con los nuevos aumentos se hace cada vez más difícil responderle que sí al despachante de combustible cuando pregunta: “¿Se lo lleno? En Pergamino, llenar el tanque de un auto con un tanque standard de 40 litros cuesta $15,184. Y si lo que busca llenar es el depósito de una camioneta diesel, que por lo general tienen una capacidad de 80 litros, el valor llega a $32,976.
Cuándo fue el último aumento en los precios
La petrolera estatal argentina dispuso esta semana un nuevo aumento del 12,5% en el precio de los combustibles, para acoplarse a las subas recientes de Shell, AXION y Puma. Hasta hace diez días, YPF era la única petrolera que se resistía a aumentar el costo de los hidrocarburos.
En este contexto, el ministro de Economía, Sergio Massa, brindó detalles sobre un acuerdo con las petroleras a los efectos de congelar los valores hasta el 31 de octubre próximo: “Agradezco a YPF que tomó la decisión de esperar un acuerdo general de la industria y refinadores para coordinar el aumento. La decisión de cuidar el bolsillo de la gente tiene un primer impacto, que es la imposición del FMI en el marco del programa que Argentina tiene vigente con el Fondo, de una devaluación de la moneda del 22,5%”.
"A partir de un trabajo entre productores, refinadores, la Secretaría de Energía, Aduana y la Secretaría de Comercio, hemos avanzado en un acuerdo. Implica que el aumento será el último hasta el 31 de octubre, no habrá más subas porque no habrá más aumentos en el tipo de cambio”, puntualizó el funcionario del Gobierno.
“Una parte del aumento lo asumen los consumidores, otra las empresas del sector y otra el Estado, que resigna impuestos para garantizar entre todos un sendero. Resignamos recursos fiscales y las empresas utilidades para cuidar el bolsillo de la gente”, detalló Sergio Massa.
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