Motorhome es la moda desde hace años que también llegó a Argentina. Es un pasatiempo compartido para disfrutar del ecoturismo, paseos cortos en familia, viajes aventureros y para soporte de trabajos rurales.
Luego de la pandemia cada vez más personas optaron por vacacionar en este tipo de vehículos que se encuentran equipados para evitar la necesidad de pasar noches en hoteles ya que cuentan con su propia habitación con cama, baño y cocina. A partir de entonces, se empezó a imponer el turismo de corto tiempo, o de cercanía.
En Pergamino existen muchas personas que, desde hace años, prefieren salir de viaje con sus familias en este tipo de vehículos. Diarionucleo.com dialogó con Luis Ledesma, dueño de la empresa familiar Pampamotorhome, quien un día se propuso construir un vehículo para uso personal y hoy vende motorhome y campers a todo el país, desde Ushuaia hasta Misiones.
La empresa que nació sin querer
Hasta el año 2017, Luis Ledesma trabajaba en el rubro de la construcción hasta que quiso involucrarse en nuevos desafíos y comenzó a diseñar un motorhome para usarlo junto a su familia y salir de vacaciones hacia distintos puntos del país y del extranjero.
"Vendí todas las herramientas que tenía de mis años en la construcción. Me compré una Sprinter larga y la transformé en un motorhome", recordó.
El primer viaje de la familia Ledesma en el nuevo vehículo tuvo como destino Brasil. La experiencia fue más que positiva y despertó en Luis el deseo de seguir haciendo más unidades. "Vendimos la Sprinter y fabriqué otro, y después otro y así comenzó a generarse la cadena".
La pandemia del 2020 puso en pausa el trabajo de millones de argentinos pero para la familia significó una oportunidad para continuar fabricando unidades en el garaje de su casa e incluso en la verdad con la ayuda de sus vecinos. Fue así como en pleno confinamiento nació Pampamotorhome.
Una vez pasada la pandemia, Luis y Silvia, su esposa, lograron adquirir un galpón más grande para trabajar y, aquella iniciativa que había surgido como la fabricación de un motorhome para disfrutar en familia, tomó forma de negocio y sumó dos integrantes más que son yernos del creador de la empresa.
"La fabricación de motorhome es un trabajo muy artesanal que tiene un contacto mano a mano con los clientes. Al comienzo comprábamos los vehículos y los vendíamos y ahora son nuestros clientes quienes los compran y los traen para que armemos el interior adaptado al estilo de vida de ellos. Para cada pedido, indagamos sobre el tipo de viaje que quieren hacer, con cuántas personas y cuáles son sus costumbres a la hora de viajar y, conforme a esto, fabricamos el diseño más apropiado", señaló.
Los vehículos que generalmente se usan para fabricar motorhome son Mercedes Benz Sprinter 413, 416 y 515, y las Ford Transit. "Están pensados para viajes largos de dos personas y para viajes cortos de cuatro a cinco personas". Su tiempo de fabricación promedio es de 90 días.
Al poco tiempo apareció la idea de ofrecer un nuevo producto, los campers. Cuando comenzaron a mostrar la nueva unidad que les llevó un año y medio de trabajo, los clientes no dudaron en pedirles más producción. "La primera unidad también fue fabricada para uso familiar porque nos gusta viajar a la montaña y conducir en caminos complicados con 4x4".
Fue así como Pampamotorhome comenzó a tener presencia en el mercado y hoy en día tienen clientes en todo el país y los llaman para exhibir sus unidades en muestras exclusivas de vehículos viajeros. "Esta es la historia de cómo fueron ocurriendo las cosas sin querer", expresó Luis.
Tanto una camper como un motorhome 0 kilómetro y con el trabajo de interior finalizado tiene un valor de entre 75 y 80 mil dólares. Y la camperización de un vehículo cuesta entre 18 y 26 mil dólares, dependiendo de si está hecho de materiales importados o nacionales.
Pasión motorhome
Antes de considerarse fabricantes de vehículos, Luis y Silvia se definen como amantes de las escapadas a las montañas en motorhome o campers. Supieron transformar el disfrute en sustento económico y trasladaron su pasión a sus clientes.
"Son muchos los beneficios, uno sería que no tenés horario para llegar a ninguna reserva de hotel y otro que podés tomar cualquier camino sin preocuparte en dónde vas a dormir porque lo haces en tu propio vehículo y en todas partes que se te ocurra.
Tenés la libertad de estacionar enfrente del mar y quedarte ahí los días que quieras y después cambias de paisaje", sostuvo.
Ledesma explicó que en Pergamino existe una "cultura motorhome" que previo a insertarse en ese mundo no percibía. Su uso se está abriendo cada vez más a partir de la pandemia porque, según Luis, "la gente tenía miedo de contagiarse en los hoteles y entonces algunos optaron por realizar otro tipo de viajes en los que tenés todo el tiempo tu propio departamento en donde sea".
-¿Qué le dirías a aquellos que no han tenido la experiencia de vacacionar en motorhome o en campers?
- Tienen que probarlo. No hay necesidad de comprarse uno ya que se pueden alquilar. Anímense porque les cambia la vida, no van a andar a las corridas y van a aprovechar mucho más del tiempo y de la naturaleza. Parás en medio de la montaña o frente a un lago y te vas cuando vos quieras. Tienen que animarse.
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