La sombra de la desidia estatal se cierne sobre el Correo Argentino en Colón. Desde hace tiempo, las dependencias del organismo en todo el país vienen sufriendo despidos y retiros voluntarios, una situación que no es ajena a la sucursal colonense donde, en las últimas semanas, dos empleados fueron desafectados y el horario de atención al público se redujo drásticamente a solo tres horas diarias.
La situación en Colón no es más que un reflejo de la crisis que atraviesa el Correo Argentino a nivel nacional. El cierre de sucursales en localidades de la región como Hughes, Alberdi, Leandro Alem Baigorrita, Zárate, San Nicolás, Ramallo, San Pedro y San Fernando, entre otras, ha dejado a amplias zonas del país sin acceso a un servicio postal básico y eficiente.
En Colón, la reducción del personal y del horario de atención ha generado un clima de incertidumbre y preocupación entre los usuarios del servicio. Con solo tres empleados para atender a la demanda, las colas y los tiempos de espera se han incrementado considerablemente, generando malestar entre los clientes.
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